Se trata de la impresión del cuaderno. Resulta que ya tengo impreso el cuaderno completamente y es precisamente ahora que me doy cuenta de mi gran error, imperdonable. Para imprimirlo utilicé un método fácil, pero olvidé hacer algunos cambios. Primero pasé el cuaderno a un archivo online de mi perfil de Blogger. Después que lo tenía ya todo dispuesto, con una nueva plantilla y sin los formatos del blog original, fue entonces que pasé a la impresión. En efecto, había olvidado que al hacer eso yo estaba poniéndome como autor de todas las publicaciones. Ahora, repasando la impresión veo ese error catastrófico y no hay remedio. La impresión la hice ayer en el trabajo ya que en casa el cartucho de la impresora está vacío.
Lo único que puedo hacer es ir ahora hoja por hoja y escribir cambiar a mano, con un bolígrafo, el nombre de autor. Espero que los autores me disculpen. Delante del prólogo pondré entonces el aviso de error y prometo que no pasará para la próxima. El cuaderno tiene un total de 135 páginas, aunque todo está en blanco y negro; también las fotos, y no como los últimos cuadernos que puse las fotos a color. Mañana le daré el cuaderno a Romy para que lo encuaderne en el trabajo y Oliver por la noche se lo llevará entonces.
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