Y Dios pobló la tierra con Romy y Raúl. Les dio casa, hijos, coche y trabajo. Todo para que pudieran desarrollarse sanamente y vivir felices hasta el último de sus días.
Y Satanás creó las computadoras.
Y las computadoras desarrollaron programas interesantes.
Y Satanás le preguntó a Raúl: ¿te acuerdas de jugar ajedrez? Podrás jugar contra un programa fuerte sin salir de tus cuatro paredes y aprenderás mucho. El ajedrez es como la vida, pero con la ventaja de que si no te gusta una partida, la terminas y podrás comenzar otra y así por los días de los días.
Y Raúl dijo: “sí, y también quiero una campanita para llamar a Romy cada vez que necesite algo”
Y Raúl empezó a jugar ajedrez mañana, tarde y noche.
Y Dios le susurró a Raúl: “Escribe en un diario, para que no te aburras. Empezarás escribiendo sobre ti y tus cosas, después vendrán los lectores…”.
Y Satanás creo los programas para textos, con corrección, diccionarios y de todo.
Y Raúl empezó a escribir y a saltar de ventana en ventana. Cada día dejaba más atrás la realidad cotidiana y se adentraba más en la vida virtual de las escrituras, el ajedrez y mucho más.
Y Dios le compró una lapto a Raúl para la casa, y otra para el trabajo, y otra para cuando estuviera de viaje.
Y Satanás inventó la Internet.
Y Raúl vio que estaba bien todo, que le gustaba la vida así.
Y Satanás desarrolló la Web 2.0.
Y Raúl empezó a desarrollar su propia Web como si fuera un informático estudiado, sus blogs, sus fotos y sus videos.
Y Dios dijo: "Mirad que te he dado una buena mujer para que te lo haga todo y tengas tiempo y no tengas que pararte de la silla."
Y Satanás inventó Google, Facebook, Blogger, etc, etc.
Y Raúl se adosó a la silla, subió los pies y ya no le interesaba hacer ejercicios, reír con los demás, jugar baloncesto, ir al cine con su esposa, conocer otros lugares, compartir con sus hijos, visitar su patria.
Y creó Dios le regaló amigos, para que a Raúl no se aislara totalmente y ellos venían a verlo y lo invitaban para que saliera delante de la computadora.
Y Satanás concibió el teléfono móvil, los iPhone, Blackberry, la Internet inalámbrica.
Y Raúl iba a visitar a sus amigos y a la vez navegaba en la Internet, siempre online, llamaba a sus amigos y descuidaba a los que tenía delante.
Y Satanás dijo a Romy: "Debes estar orgullosa de un hombre fiel, que no se interesa por otras mujeres, siempre está en casa, a tu lado, mientras tú miras la televisión u hojeas un catálogo".
Y Romy le llevaba chicharritas, chicharrones, caramelos, jugos y vinos a Raúl a su cuarto o a su sitio frente a la lapto.
Y Raúl, sumergido en la pantalla de su lapto, comía las golosinas, que eran abundantes en azúcares, grasas insolubles y sales que obstruían las venas.
Y vió Satanás que estaban bien Raúl y Romy; sobre todo Raúl.
Y Raúl empezó a presentar muchos gases, a infestar el medio ambiente, a sentir cólico y malestares.
Y dijo Dios: "No es bueno que Raúl sufra con las comidas y las golosinas."
Y entonces lo mandó al médico, a los psicólogos, le puso dos bastones en las manos y lo mandó al bosque.
Y Satanás creó el calentamiento de la tierra, los terremotos, las riadas.
Y Raúl se alegraba de no tener que salir de casa y de disfrutar de su vida regalada.
Esta teología continua en el “Nuevo testamento”. Pronto le llegará a través del blog que usted abonó. Si quieres estar al tanto de todo, entonces...
Y Satanás creo…Twitter.
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