domingo, 21 de agosto de 2011

El embarazo psicológico y sus secuelas

Gilberto

Mi querido tío, he visto las fotos del embarazo de mi tía. No sabes el sentimiento de desazón y rivalidad que me embargó. Pienso que parto de mi experiencia personal y viéndome así a los 50 años, algo cansado y sin “deseos” de muchas cosas – en un sentido mucho más amplio de la palabra – pues en alemán “deseo” se puede ir por la variante semántica de anhelo, aspiraciones, petición, etc., aunque más bien me refiero a la frecuencia, me veo en la obligación de averiguar un poco más algo sobre tus andanzas y así quizás obtener el secreto tuyo de tanto vigor.

Lo primero que hice fue inspeccionar un poco más las fotos. Primeramente la agrandé al tamaño original y así poder indagar mejor. Te vi esa barba de chivo, la cadena que te cuelga y la bermuda roja. Creo que esa constelación te hace muy juvenil. Pero descubrí también en tus ojos y tu mirada esa brillantez e intensidad típica de los jóvenes lascivos. Quedé estupefacto. No me queda más dudas, estás tomando algún fármaco fuerte o mi prima Reyna te está haciendo puré de viandas con huevos de jicotea. No creo que eso sea algo normal; lo de tu vigorosidad.

En cuanto a tía, espero que no tenga complicaciones. A esa edad y con esa barriga, vaya usted a saber. Me preocupa mucho. Tío Pepe nos regaló tarde dos primos buenos, pero tu regalo no llega tarde ni atrasado, llega en momentos inesperados, cuando ya nuestra psique se va adaptando a la de un abuelo y las aventuras con los primos son ya cosas de la niñez. Espero que logres contenerte un poco más en el futuro, pues la actividad amatoria postnatal puede afectar mucho a mi tía. No obstante, no descarto la variante de un embarazo psicológico, influenciado por tu cercanía y la fragancia de tus glándulas exocrinas.

Aquí inserto una foto que les hice a dos marranos cerca de la comarca donde vivo. Me dijeron que el verraco se llama Gilberto. Entonces empecé a pensar en los nombres y su influencia. Pero creo que ya es tarde para cambiarse el nombre.

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