Mi prima, la tormenta de aire no fue nada en comparación con
la tormenta de tus palabras. Fueron breves, pero batió los records de velocidad
del viento. Creo que el viento estuvo aquí por encima de los 100 km/h, pero tus
palabras pasaron los 200 km/h. Eso incentivó mi preparación combativa, aunque
no hubo alarma de evacuación. La única alarma que hubo fueron tus palabras, que
más bien ahora con eso del Affaire de la Merkel me dejó pensando si no es un
chiste de mal gusto de los Amis, que están espiando mi teléfono e introduciendo
mensajes en nombre tuyo. Por si las moscas, di la alarma a la Defensa Civil y
puse un filtro de palabras, donde por casualidad hubo una de tus palabras
claves, como loquito y al compararla con
Loquy, parece que fue condescendiente conmigo. Es un algoritmo de palabras que
tú utilizas con más frecuencia. Tengo muchos ejemplos: mijito, no, tengo,
tiempo, la, Galle, trabajo, iglesia, comida, planchar, limpiar, barrer,
escuela, etc. Viste, estoy botao! El Principe
PS. Publicaré este intercambio amistoso en Rincón familiar
para que quede constancia del Renacimiento del Ave Phoenix. Será una serie
corta, pero no importa. Así quedará un testimonio de nuestras caritativas palabras.
Por el momento sólo será seguida por Gladys en Houston.
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